Las máquinas expendedoras son un
excelente negocio, pero eso no quiere decir que gastes todos tus ahorros y
saques miles de créditos para comprar muchas máquinas. Si haces eso te vas a
quedar con muchas máquinas y nada de dinero y te desilusionarás rápidamente.
Hemos hablado de como las ubicaciones
son clave para triunfar en este negocio, así que no vas a comprar máquinas, vas
a buscar espacios. Todos conocemos el imperio de comida rápida de los arcos
dorados. Ellos se hicieron un imperio justamente así, consiguiendo primero los
espacios.
Ya te decidiste a poner tu
negocio de expendedoras, ahora es el momento de buscar espacios. Piensa donde
las quieres poner, sigue con tu rutina diaria, identifica a lo largo de tu día
todos los lugares que te parezcan atractivos, identifica el tipo de producto
que se podría vender en ese espacio, identifica al responsable, haz un plan de
negocio y con base en eso selecciona el tipo de máquinas que necesitas y al
distribuidor que te las puede vender.
Cuando ya hiciste todo eso y
conseguiste los espacios haciendo convenios, entonces ya rompes el cochinito y
compras las máquinas que necesitas para los lugares que ya trabajaste
previamente.
Para iniciar tu negocio de
máquinas expendedoras necesitas alrededor de quince mil dólares cuyo regreso
aproximado es de un año.
Hay muchas formas de hacerse con
los recursos para iniciar. Se creativo, desde luego junta tus ahorros, pero
considera también la opción de obtener un crédito bancario, de participar en
alguna convocatoria que ofrezca créditos o fondos para emprendedores, puedes
conseguir un socio que aporte el capital y te de la opción de comprar su parte
al recuperar la inversión.
Si consideras lo que te costaría
adquirir una franquicia para lo que ya hablamos de millones o si piensas en lo
que cuesta adquirir una flotilla de autos para dar servicio de transporte y
para los cuales tienes que adquirir seguros y contratar choferes que deben
tramitar permisos, darse de alta en la seguridad social, cuyos perfiles debes
investigar a fondo, checar referencias, acordar sueldos, solventar los gastos
de operación, el negocio de las máquinas expendedoras es infinitamente mejor.
Es mejor porque no requiere
empleados, porque te da una ganancia diaria, porque el costo de operación es
bajo, porque asegurarlas es más fácil, porque a diferencia de los coches están
en un lugar fijo donde puedes monitorearlas cuando quieras.
Si piensas en cuanto tienes que
invertir, en realidad es poco cuando enumeramos las ventajas de un negocio que
ha funcionado desde el antiguo Egipto y que seguirá funcionando en el futuro
por su naturaleza sencilla.
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