A
veces los emprendedores tienen ideas increíbles en su mente, logran desarrollar
planes a largo plazo tomando en cuenta todos los detalles, son capaces de
buscar proveedores, detectar negocios convenientes e identificar oportunidades
para crecer. Sin embargo, cuando llega el momento de negociar con alguien más
para cumplir con sus objetivos fracasan. ¿Por qué sucede eso? Porque no se
desarrollan adecuadamente las habilidades de negociación, fundamentales para
alcanzar las metas planteadas.
Negociar
no es tarea fácil, pero nadie nació sabiéndolo hacer. Si bien es cierto que
existen personas que lo hacen naturalmente, también hay quienes desarrollan una
habilidad con práctica, paciencia y mucha atención.
Cuando
ya has detectado el lugar ideal para instalar tu máquina vending, debes iniciar
la búsqueda de la persona indicada con la que debes hablar. Puede ser que tengas
que ir con el dueño del edificio o tal vez baste con el supervisor o gerente,
lo importante es que ubiques quién es la persona indicada y te acerques sin
miedo.
Busca
información de la persona con la que pretendes negociar. Identifica cuáles son
sus creencias, valores, su cultura y sus gustos. Cualquier dato que te ayude a
construir un perfil te ayudará a hacer una buena negociación. Sucede muy
seguido que los arrendatarios de los lugares ni siquiera están al tanto del
potencial que tienen sus espacios, por lo que es tu tarea conocerlos para
hablarles en su “idioma”.
Cuando
tengas suficiente información de esta persona, procederás a crear una
estrategia de negociación, esto es definir las directrices, con base en la
información que tienes sobre la persona, de cuándo debes ofrecer, cuándo debes
escuchar y cuándo debes esperar. Todo está en los momentos oportunos.
Debes
tener definido claramente cuál es tu objetivo en la negociación. Establecer el
límite al que puedes llegar y qué tan flexible puedes ser durante la
negociación. Todo eso debe ser previo y lo debes razonar considerando todas las
posibilidades que puedas imaginar; entre más posibilidades pasen por tu mente,
estarás mejor preparado para la negociación.
Recuerda
que una buena negociación tiene como resultado el beneficio para ambas partes,
por lo que debes tener en cuenta cuáles son los resultados que ofrecerás al
propietario del lugar con tu máquina vending. Sin duda él podrá beneficiarse
del aumento de tráfico gracias a la máquina y de usuarios más contentos y
satisfechos por los productos que se ofrecen.
Además,
pueden crear juntos una estrategia para potencializar los beneficios, por
ejemplo, la persona que está a cargo del área donde se pretende instalar la
máquina seguro conoce perfectamente cuál es el perfil de las personas que
transitan por ahí, incluso es posible que conozca a varias de ellas y pueda
decirte exactamente qué es lo que les hace falta. Luego de todo esto, será
cuestión de colocar los productos indicados en la máquina vending y dejar que
el negocio funcione de manera natural.
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